Reconocido comerciante y apreciado por la comunidad por su compromiso social, en su ámbito más íntimo fue un esposo ejemplar, un padre dedicado, un abuelo amoroso y un amigo leal. Nació el 12 de julio de 1936, dado su infancia transcurrida en el campo, prontamente comenzó a colaborar en las actividades familiares que conllevaban el pastoreo y labores agrícolas.
A los 17 años emigró a Potrerillos, donde contrajo matrimonio con Maguer Olivares Rojas, a quien con mucho cariño llamaba “Mayita”. Junto a ella y sus suegros, decidió emprender un camino en el rubro del comercio, al que se dedicaría con esfuerzo y vocación durante toda su vida.
De la unión de Roberto y “Mayita” nacieron Gilda y Roderik, quienes crecieron siendo testigos del compromiso y sacrificio de sus padres. Aquellos valores y el ejemplo diario los impulsaron a continuar por la senda del trabajo, compartiendo con su padre no solo la vida familiar, sino también la laboral. Gracias al esfuerzo conjunto, ambos lograron formarse como profesionales.
Roderik, además de ser su hijo, fue su compañero y socio. Vivió de cerca el entusiasmo con la que su padre enfrentaba cada jornada de trabajo, pasión que hoy continúa honrando a través de la empresa fundada por don Roberto: Sociedad Roderik Ávila y Cía. Ltda.
Desde su fundación en 1990, la empresa Sociedad Roderik Ávila y Cía. Ltda. se ha dedicado al rubro del transporte y la prestación de servicios en proyectos de ingeniería industrial, así como al arriendo de equipos y maquinarias para la pequeña, mediana y gran minería. Uno de sus primeros clientes fue la reconocida Empresa Candelaria Lundin Mining.
Desde el fallecimiento de su fundador, Roberto Segundo Ávila, el 10 de diciembre, la empresa ha continuado creciendo, guiada por los valores con los que fue concebida: la responsabilidad, la cercanía con sus trabajadores, y la visión de seguir siendo una empresa familiar, donde las personas son lo más importante.
La empresa que un día soñó Roberto hoy se mantiene vigente en el mercado, con 35 años de trayectoria. Bajo el liderazgo de Roderik y Renato, continúa trabajando con dedicación para seguir siendo una compañía a la vanguardia en su rubro, siempre fiel a sus raíces como una empresa familiar, nacida en el corazón de los copiapinos.